Fayo eterno

En esta temporada de verano se abrieron una cantidad respetable de muestras. Algunas se encuadran en las actividades para festejar los 125 años de Tuxtla Gutiérrez como capital de Chiapas, un hecho que ha sido polémico porque la antigua capital consideró injusto el traslado de poderes. Tema que en esta ocasión dejaré de lado para señalar dos cosas diferentes: 1. El uso de nuevos espacios para la realización de actividades, entre ellos los espacios alternativos que, en Chiapas, desde los años noventa, del siglo pasado, se abrieron y cerraron. Un tema que ha sido impulsado por las políticas públicas que pasaron del paternalismo y conducción desde el Estado al impulso de un mercado de libre competencia que no se ha consolidado. Sin embargo, para el caso de la joven capital del estado libre y soberano de Chiapas se concreta en el Museo de la Ciudad administrado por una Asociación Civil. 2. Las actividades de profesionalización del personal que organiza las actividades culturales reali

En días recientes tuve la oportunidad de acercarme al Museo de la Ciudad, en Tuxtla Gutérrez, para ver por vez primera una exposición de Ninfa Torres, artista formada en la Universidad Veracruzana, en Xalapa, y quien vive en Tuxtla Gutiérrrez por una década, aproximadamente. Confieso que la temática insinuada en el título me pareció ligero y propio para una época de devastación y de intelectuales sosos e institucionalizados. Así que fue lo menos relevante en mi visita. También he de mencionar que he seguido la obra de Ninfa porque a su excelente factura ella ha agregado un toque de ironía en sus productos de corte realista. Pero, para no orientar al espectador, prefiero dejarle algunas fotos de lo que pude mirar con calma. Pintura de Ninfa Torres. Foto de Rafael Araujo. 2017. Pintura de Ninfa Torres. Foto de Rafael Araujo. 2017. Pintura de Ninfa Torres, foto de Rafael Araujo. 2017.  Vista general de la Galería del Museo de la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez. Los cu